En los cuatro puntos cardinales. Esa es la metodología de la campaña que la fórmula del Frente Justicialista por Tucumán viene desarrollando en las últimas semanas y que, hasta el final de la campaña, se profundizará. El gobernador Juan Manzur y su vice Osvaldo Jaldo recorren, por separado, municipios y comunas rurales con la idea de “fidelizar el voto peronista”, pero también sumar a aquellos que aún están indecisos, señalan sus principales referentes de campaña del oficialismo local.
La Casa de Gobierno se monta en las últimas encuestas encargadas que le anticipan que, en las elecciones del 9 de junio, obtendrá un triunfo en las urnas. Reconocen, a su vez, que la pelea por la gobernación seguirá concentrada en el peronismo que, en otras elecciones ha llegado a alcanzar el 55% de los sufragios.
“¡¿Qué locura es esta?! Pese a la crisis económica y los nuevos aumentos del macrismo a la luz y a la garrafa de gas, los vecinos de San Ramón mantienen el humor. Gracias por el apoyo y cariño. El 9 de junio vamos a frenar el ajuste en Tucumán y a dar un mensaje a nivel nacional”, posteó ayer el gobernador en su cuenta en Twitter. Precisamente, Manzur y Jaldo intentan capitalizar el descontento de la sociedad contra las políticas económicas que instrumenta la gestión del presidente Mauricio Macri.
Manzur y Jaldo convergen, además, en actos proselitistas cada fin de semana, como sucedió ayer en el interior. “Agradecemos el respaldo del gran equipo de dirigentes del espacio de Juan Antonio Ruiz Olivares. Vamos a seguir trabajando en forma conjunta por todos los tucumanos”, escribió el vicegobernador en las redes sociales, tras participar de un mitin organizado por el legislador monterizo y principal referente de Acción Regional, uno de los aliados al PJ.
Dentro de la estructura oficial reconocen que puede evidenciarse un repunte de la fórmula de Vamos Tucumán (Silvia Elías de Pérez y José Manuel Paz), en desmedro de la de Fuerza Republicana (Ricardo Bussi-Eduardo Verón), particularmente en la capital provincial. Así lo dicen sus sondeos. Ambas fuerzas vienen potenciando los reclamos de mayor seguridad, considerado como el talón de Aquiles de la actual gestión de Gobierno provincial. Para revertir esta imagen, el Ejecutivo intenta montar una mayor presencia de efectivos en las calles, de manera de lograr bajar los índices paulatinamente. Paralelamente, el propio Manzur está reuniéndose con los equipos encargados de capacitar a los fiscales de mesa de su espacio. La idea es consolidar la estrategia territorial, particularmente en la Capital, como una manera de contrarrestar la estructura del actual intendente Germán Alfaro.
En el Palacio de Gobierno consideran que hay un mayor trabajo por parte de los referentes del Frente Justicialista. “Aquí se están jugando el cuero y nadie está sacando los pies del plato”, graficó uno de los principales referentes del manzurismo.